Aunque por todos es conocido que los felinos son animales muy limpios, debemos realizar ciertos cuidados con ellos para mantener la higiene del gato. Si empezamos con estos cuidados cuando aún son pequeños nos resultará más fácil en su vida de adulto.
¿Cómo cortar las uñas de los gatos?
Las uñas son muy importantes para los gatos, con ellas realizan los comportamientos propios de los felinos: rascar, arañar, cazar, jugar, marcar… por esta razón la desungulación es un acto completamente contraindicado para la salud mental del animal.
Para que un gato no arañe a persona u objetos hay otros métodos como redirigir los arañazos a rascadores con hormonas artificiales, ofrecerle más enriquecimiento ambiental, observar sus hábitos de rascado, etc.
Conviene cortar las uñas cada 15 – 20 días para mantenerlas bien cuidadas, existen cortauñas específicos para los perros y gatos, no utilices para humanos ya que la uña no tiene la misma forma ni dureza. Es mejor si el gato está relajado para evitar que asocie el corte de uñas a una mala experiencia.
Ten mucho cuidado de no cortar la zona más carnosa de la uña, es donde se encuentran los nervios y vasos sanguíneos y puede sangrar y producirle dolor al gato.
El cepillado en gatos
Los gatos se acicalan a sí mismos con mucha frecuencia, los pequeños ganchos que tienen en la lengua ayudan a desenredar y limpiar el pelo. No obstante, el cepillado contribuye a mantener su salud, evitar nudos, enredos y la formación de bolas de pelo que pueda tragar. Además puedes aprovechar este momento para examinar el estado de la piel del gato y reforzar el vínculo propietario – mascota.
El pelo se cepilla con suavidad, en el mismo sentido del nacimiento del pelo y a contrapelo para eliminar los pelos muertos. La frecuencia del cepillado dependerá de la longitud del pelo:
- Una o dos veces a la semana en gatos de pelo corto.
- Diariamente en gatos de pelo largo.
Combinado con el cepillado podemos utilizar malta para reducir las bolas de pelo que el felino ingiera al acicalarse.
Limpieza de ojos y oídos para mantener la higiene del gato
Los ojos sanos tienen un aspecto brillante sin suciedad en los lagrimales. Para limpiarlos existen limpiadores específicos para perros y gatos que además evitan que se oxide el pelo circundante, pero también puedes utilizar suero fisiológico sobre una gasa limpia. Con un movimiento suave retiras las legañas y la suciedad acumulada en la zona.
Para limpiar los oídos también se comercializan soluciones limpiadoras para mascotas que tienen una consistencia aceitosa, los limpiadores para personas son acuosos y no se recomiendan. Unas gotas del producto se aplican sobre el oído, se da un masaje suave y se deja que el animal se sacuda, la suciedad que salga se retira con una gasa o un algodón.
Nunca utilices bastoncillos de algodón ya que podrían dañar el oído.
¿Debo desparasitar a mi gato?
La mejor forma de prevenir parásitos y las enfermedades que éstos causan es utilizar antiparasitarios periódicamente, aunque el animal no salga de casa.
Lo aconsejable es utilizar pipetas sobre la piel del animal una vez al mes, hay que tener especial cuidado en que los antiparasitarios no tengan permetrinas en su composición ya que son altamente tóxicas para gatos, asegúrate de que compras pipetas específicas para gatos. Algunas pipetas previenen parásitos externos e internos, pero si este no es el caso puedes adquirir antiparasitarios internos en forma de comprimidos cada tres meses.
En ciertas comunidades autónomas como Andalucía es obligatorio hacer una desparasitación interna anual firmada y sellada por un veterinario.
Estos son algunos de los aspectos principales en la higiene del gato, si quieres saber otros consejos sobre felinos y sus cuidados puedes encontrarlos en nuestro blog, ¡también puedes contactarnos en Facebook e Instagram!